Un logro discretamente colosal de uno de los creadores de imágenes más destacados del cine contemporáneo. En una noche de tormenta en las montañas de Grecia, un par de jóvenes descarriados abandonan a su hijo recién nacido. Acogido por una familia de agricultores, Ion crece sin conocer a su padre ni a su madre. Años más tarde, tras un trágico accidente, es enviado a prisión, donde conoce a Iro. Los dos forman una conexión, expresada a través de la música, que, a su vez, los perseguirá y los sustentará por el resto de sus días. Inspirada libremente en la conocida historia de Edipo, la última obra de Angela Schanelec es tan aterradora como un mito y tan dulce como una canción popular.
Fuente: Rotten Tomatoes |